martes, 27 de enero de 2009

Un nuevo sendero radiante y prometedor

Queridos colegas atraídos por una misma causa:

Si nos ponemos a pensar y nos transportamos al tiempo en el cual nosotros éramos parte de aquellos del aprendizaje de nuestro idioma nativo, podemos encontrar recuerdos inolvidables y peculiares. De esta manera me sentí al estar rodeado de un número de niños con ganas de aprender, triunfar y sobre todo progresar. Con muchos de ellos pude identificarme ya que yo fui parte de un proceso de aprendizaje similar. Muchas aulas fueron testigo de mi enriquecimiento oral y escrito en español. En este caso pude percibir que los niños de la misma manera se sumergirán en el mundo del aprendizaje y con ganas superarse cada día para enriquecer sus conocimientos en su idioma nativo.
Particularmente a Liana y a mí nos motivo ver a niños hasta de tres añitos intentado alcanzar la igualdad compleja de los conocimientos que poseían los alumnos mayores. Al empezar la sonrisa que cada niño ilustrada en sus rostros nos ayudó a empezar una nueva travesía educativa obteniendo una experiencia calurosa de cada alumno presente. Yo me encargué en este caso de ayudar y asistir al grupo de los niños más chiquitos. Como en el caso de Sarita de tres anitos, una estudiante que aunque no sabía leer ni escribir, intentó seguir el dictado que Liana tenía preparado. Vi su desempeño y no tuve más remedio que felicitarla por su intención, y le asigne un trabajo independiente para empiece a familiarizarse con su idioma nativo. Oraciones como “mamá me mima con mimi, o el famoso, a e i o u” fueron unos de los dictados que Sarita tuvo que completar y de esta manera trazarse la meta de progresar con el transcurrir de las clases.
En conclusión al principio como cualquier primer día de clases para cualquier estudiante, los niños fueron invadidos por la timidez y la ansiedad. Pero a medida que el tiempo nos consumía; cada niño empezó aportar su granito de arena y moldear la clase de manera acogedora y lleno de conocimientos primarios. La experiencia obtenida por ambos instructores fue algo incomparable en las que les aseguro que jamás la olvidaremos ya que en un día como ese fuimos parte de este proceso, pero ahora nos tocas ser los instructores y ver el aprendizaje de otra perspectiva.

Un saludo afectuoso a todos.
Jose Alfredo

No hay comentarios:

Publicar un comentario